El dólar peso ha iniciado sus primeras operaciones a la baja, con la primera transacción en el sistema interbancario realizada a 919.50. Este movimiento a la baja ha sido impulsado por el precio del cobre, que ha superado los 4.8 dólares la libra y se acerca a los máximos de marzo de 2022, cuando cotizó por encima de los 5 dólares la libra. Según Goldman Sachs, nos adentramos en un ciclo de altos precios del cobre, lo que podría mantener la presión bajista en el dólar peso.

Además, la divisa local ha encontrado un sólido soporte en los 918-919, lo que dificulta la consolidación del precio por debajo de estos niveles y eventualmente podría continuar hasta los 907, donde se encuentra el siguiente nivel de soporte. También observamos una disminución continua en la posición extranjera, que ya se sitúa en 3700 millones, lo que sugiere una postura bajista hacia el dólar por parte de los inversores extranjeros.

Es crucial mantenernos atentos a los datos macroeconómicos en Estados Unidos para evaluar cualquier cambio en el discurso de Powell en la próxima reunión de la FED, y determinar si persiste la posibilidad de tres recortes de tasas durante este año. Por nuestra parte, el 23 de mayo conoceremos la tasa de política monetaria, lo que podría impulsar nuevamente al alza la divisa o consolidar el precio por debajo de los 900, dependiendo de la agresividad o moderación de la reducción.