El gran protagonista de la jornada de hoy es el acuerdo comercial preliminar entre Estados Unidos y la Unión Europea sobre aranceles.

Aunque aún se trata de un marco general que requiere más detalles, el acuerdo contempla varios puntos clave: un tope permanente del 15% en los aranceles para bienes europeos que ingresen a EE.UU., un compromiso de la UE de comprar USD $750 mil millones en energía estadounidense —con el objetivo de reducir su dependencia del suministro ruso— y una inversión adicional de USD $600 mil millones desde Europa hacia la economía estadounidense.

También se incluye un sistema de arancel 0% para productos específicos, como aviones y sus partes, equipos de semiconductores, ciertos químicos, medicamentos genéricos, productos agrícolas, recursos naturales y materias primas críticas, entre otros.

Eso sí, los aranceles sobre bebidas alcohólicas siguen siendo tema pendiente de negociación.

En Asia, los mercados bursátiles cerraron mixtos: el Nikkei 225 de Japón cayó cerca de 0,85%, mientras que el Hang Seng de Hong Kong subió 0,48%. El índice Shanghai Composite se mantuvo prácticamente sin cambios.

El ánimo en la región estuvo marcado por la expectativa de nuevas conversaciones comerciales entre EE.UU. y China en Estocolmo, con señales de que la actual “tregua arancelaria” podría extenderse por otros 90 días, lo que mejoró el sentimiento del mercado, especialmente en China.

En datos económicos, la Oficina Nacional de Estadísticas de China informó que las utilidades industriales cayeron 4,3% interanual en junio, tras una baja de 9,1% en mayo.

Los futuros de los índices europeos y del S&P 500 de EE.UU. apuntan a alzas cercanas al 1% al inicio de la sesión europea, impulsados por el anuncio del acuerdo comercial transatlántico.

Por otro lado, Samsung Electronics firmó un contrato multianual por USD $16.500 millones con Tesla para fabricar chips, lo que impulsó sus acciones hasta un 3,5% durante la jornada.

En el mercado cambiario, el dólar estadounidense abrió al alza, con el par EUR/USD cayendo hacia 1,1740 tras conocerse los detalles del acuerdo entre la UE y EE.UU. y el anuncio del aumento en las importaciones de energía norteamericana por parte de Europa.

Las monedas de riesgo, como la libra esterlina, el dólar australiano y el neozelandés, se mantuvieron débiles frente al dólar, mientras que el yen japonés y el franco suizo operaron estables; el USD/JPY rondaba los 147,7, justo bajo una resistencia técnica importante.

Esta semana, la atención de los inversionistas está puesta en las reuniones de la Reserva Federal y del Banco de Japón, además del dato de inflación de Australia que se publica este miércoles, clave para el futuro de la política monetaria del RBA.

Por último, la temporada de resultados entra en su fase más intensa, con el 37% de las empresas del S&P 500 entregando balances esta semana, incluyendo a las gigantes tecnológicas del grupo «Mag7».

En cuanto a las materias primas, los metales preciosos iniciaron la sesión con baja volatilidad, mientras que en el mercado energético el gas natural y el petróleo WTI suben 0,86% y 0,75%, respectivamente.